La fortaleza de toda mujer fuerte nació del dolor y el sufrimiento. En muchos momentos de sus vidas se han sentido débiles e indefensas. La fortaleza que llevan dentro ahora no es el resultado de la nada. Fue cultivada, nutrida y cuidada. Ellas saben que no hay ayer, no hay mañana, que todo es hoy. Es todo lo que tiene.
Esa fortaleza es el resultado de horas, días, semanas, meses o incluso años de permitir que la tratarán como no lo merece, menos de lo que vale, por el temor a una reacción violenta o a quedarse sola. Toda mujer fuerte se ha ganado con sudor y lágrimas esta fortaleza y tiene cicatrices que no siempre son visibles a la vista.
Toda mujer fuerte debe hacerse promesas que le sirvan de recordatorio para no permitirse nunca volver a ser la mujer débil que alguna vez fue.
ESTAS SON LAS CINCO PROMESAS QUE CADA MUJER FUERTE SE HACE A SÍ MISMA:
1. SE PROMETE NUNCA RENUNCIAR A PARTES DE SÍ MISMA
Una mujer fuerte alguna vez se enfrentó al desafío de renunciar a partes de sí misma para no molestar a alguien que no la apreciaba. Renunció a sus intereses, gustos, amigos, trabajo o sus ambiciones. Una mujer fuerte se promete a sí misma nunca más dejar atrás partes de sí misma. Ella es una persona fuerte y completa y nunca más permitirá que otra persona la separe por piezas y sólo conserve las que considere aceptables.
2. SE PROMETE QUE NUNCA MÁS ESPERARÁ A QUE ALGUIEN CAMBIE
Nadie cambia si no quiere y esperar a que alguien lo haga y la ame de forma que ella quiere ser amada es un error que toda mujer fuerte no volverá a cometer. Ni porque le dé todo el amor del mundo podrá cambiar a alguien ni lo hará amarla como se merece. Esto solo trae frustración y decepción. Una mujer fuerte sabe lo que vale y que no vale la pena amar a alguien que no quiere ser mejor persona.
3. SE PROMETE QUE NUNCA MÁS SE CONFORMARÁ CON MENOS DE LO QUE MERECE
Toda mujer fuerte pasó un tiempo de su vida pensando que alguien tenía algo bueno y sufrió porque creyó y trato con todas sus fuerzas cultivar bondad en esa persona. Su fortaleza llega cuando se da cuenta de que se merece a alguien mejor, que es bueno por sí mismo con sus seres queridos, sin necesidad de buscar muy dentro de él su bondad. Cuando sintió esa fortaleza, se prometió que nunca volvería a suceder.
4. SE PROMETE QUE NUNCA MÁS LA MANIPULARAN
Una mujer fuerte alguna vez luchó contra alguien que jugaba con su mente y donde ella siempre perdía. Por esto, se prometió alejarse de este tipo de juegos manipuladores sin importar lo que suceda. Una mujer fuerte aprende a vivir según sus propias reglas y no permitir que otra persona le imponga las de ella.
5. SE PROMETE QUE NUNCA LA VOLVERÁN A USAR
Una mujer fuerte se hizo fuerte después de dejarse usar emocional y físicamente por conveniencia de alguien y se prometió nunca más dejarse usar. Aprendió que vale mucho y una vez que descubrió y atendió su autoestima, se volvió más fuerte que nunca. Se prometió a sí misma que nadie volvería a hacerla sentir indefensa.
Aunque la fuerza de toda mujer fuerte venga de haberse sentido alguna vez débil, impotente e indefensa, esa fortaleza la acompañará por el resto de su vida. Las lecciones a veces son difíciles de comprender y aceptar, pero una vez que se aprenden, serán de gran utilidad durante toda la vida.
Todas las mujeres fuertes tienen una lista de promesas que se han hecho a sí mismas, han aprendido a no conformarse y a no dejar que alguien las vuelvan a engañar o mentir. Sus promesas las mantienen fuertes y sanas emocional y mentalmente.
Han aprendido a ser seres humanos íntegros, personas con una gran capacidad para amar a quienes se lo merecen y la tratan bien.