Son muchos los motivos que te pueden hacer sufrir de ansiedad y nadie está a salvo de padecerla. Por supuesto, algunas personas la sufren en mayor proporción que otras, lo que los lleva a tener grandes dificultades en sus vidas.
Algunas personas pueden manejar su ansiedad haciendo ejercicios físicos o de respiración, distrayendo su mente con otros temas o haciendo alguna actividad artística. Sin embargo, existen personas a las que se les hace mucho más difícil y sufren consecuencias emocionales y físicas.
Para estas personas, a continuación les traemos tres consejos que pueden ayudarles a manejar su ansiedad:
1. Pide ayuda
No te preocupes por el qué dirán. El que pidas ayuda no significa que eres débil. Las personas que te aman no te juzgarán y estarán encantadas de ayudarte. De hecho, hay mucha valentía en admitir que se tiene un problema y pedir ayuda. La ansiedad no es algo que deberías vivir en soledad, es mejor tener a alguien con quien hablar y que te sepa escuchar. Ya verás que te sentirás mejor y empezarás a relajarte.
A veces el primer paso para superar o manejar la ansiedad es expresar lo que sientes y te está pasando, ya sea a algún ser querido o un profesional de la salud mental.
2. Escucha tu interior
Lo que a ti te produce ansiedad no necesariamente es lo que le produce ansiedad a los demás. Cada persona sobre la faz de la Tierra tiene sus propias luchas y reacciones a las circunstancias, no importa que sean iguales o parecidas a las tuyas. En parte, esto se debe al momento personal de cada uno esté atravesando y con su pasado.
Así que no te dejes llevar por lo que dicen los demás, no permitas que disminuyan lo que sientes o piensas. Tómate el tiempo para estar a solas y conectarte con tu interior y entender qué es lo que te pasa y angustia. Esta situación durará el tiempo que te tome enfrentarla y buscar la ayuda correcta.
3. Rodéate de gente positiva
La ansiedad puede crecer y crecer si estás rodeado de gente negativa. Así que procura tener cerca a personas que te amen, sean positivas y que sumen a tu vida. Necesitas que te aporten energía positiva y te desestresen. Rodéate de personas que te contagien su alegría de vivir, entusiasmo y optimismo.
La ansiedad puede volverse en tu contra si no aprendes a lidiar con ella y desarrollar las herramientas necesarias para hacerlo correctamente. Busca ayuda, si es profesional es mucho mejor, escucha tu interior y rodéate de las personas correcta. Verás que cada día te sentirás más fuerte, positivo, renovado y con esperanzas de estar y ser cada día mejor.